Una de las patologías que tratamos en nuestra clínica podológica de Castellón son las metatarsalgias. En este nuevo post del blog repasamos los tipos que existen. Como decíamos en una entrada anterior, la metatarsalgia provoca dolor en el pie y afecta sobre todo a las mujeres. Los casos más graves pueden derivar incluso en cojera. 


Se distinguen distintos tipos de metatarsalgias. Por un lado, las que afectan sólo al tejido blando del pie y, por otro, las que afectan al tejido nervioso. Otras llegan incluso a la afectación ósea. En La Clínica del Peu te recordamos que algunos tipos de metatarsalgias tienen incluso nombre propio como es el caso del neuroma de Morton. En este caso se da el engrosamiento del nervio hasta producir en el paciente un dolor invalidante. Por su parte, la enfermedad de Freiberg es una afectación ósea de la cabeza metatarsal. Conduce a una mala irrigación de la zona llegando incluso a deshacer parte del hueso.


En un principio, las metatarsalgias afectan a los dos pies. Son muchas las causas que las provocan, pero el calzado es un factor clave, sobre todo el tacón alto y las punteras estrechas. Estas últimas ejercen presión en los nervios. Tampoco ayudan las suelas delgadas y poco amortiguadoras. El origen de la metatarsalgias puede estar también en la morfología del pie. Por ejemplo, las personas con el pie cabo tienen menos superficie de apoyo y por lo tanto mayor tendencia a desarrollar este problema. Como clínica podológica de Castellón te insistimos en que la actividad deportiva que se desarrolle también tendrá que ver. Date cuenta de que las sobrecargas fomentan la desaparición del tejido graso amortiguador del pie. Los huesos acabarán por tocar directamente con el suelo. Influye, como no, el sobrepeso ya que incrementa de forma exponencial las posibilidades de desarrollar una metatarsalgia.